En estos tiempos, llenos de luchas,
manifestaciones, tensiones, rabia….leo una noticia que dobla estos sentimientos
anteriores y aumenta la indignación y porque no el dolor.
Las mujeres no vamos a
poder decidir cómo y cuándo ser madres y el cómo poder llevar nuestra vida de
forma personal e individual.
Este individuo llamado Gallardón,
nos deleita con la noticia de suprimir la interrupción del embarazo por
malformación del feto.
El justificativo, porque
es un hombre “honrado” que mira por el bienestar del ser humano, es la
protección del concebido, de darle y otorgarle los derechos que tiene que tener
como ser humano y protegerles de la crueldad humana.
“Sr. Gallardón” me
podría resolver algunas dudas que me golpean sin cesar en mi cabeza y en mi
forma de ver la vida como mujer, madre y trabajadora ¿me puede explicar que es
más cruel? ¿Vivir con dignidad o sin ella? ¿Quitarle los derechos a una mujer
en decidir una vida sin dolor o llenarle esa vida de dolor?
¿Qué ocurre con los
derechos de la mujer que con estos tipos de ley desaparecen de raíz? ¿Somos
ciudadanas de segundo orden?
Esta ley, decisión de
estos políticos fascistas, hijos del franquismo, recortan enormemente la
decisión y libertad de las mujeres y de nuestros derechos.
Es volver 40 años atrás!!!!!
Y más….
Hay recortes en Sanidad,
Educación, en la Ley de Dependencia…me puede decir ¿Cómo se va a poder cuidar,
mantener, educar y sostener a estos seres concebidos como usted los llama?
Cuando usted y la gente
como usted, nos imponen estos recortes ¿dónde están los derechos de la
ciudadanía, de los seres humanos que vivimos el día a día en esta sociedad?
¿O es que realmente este
anuncio de posible ley es para desviar la atención del régimen fascista que se está
implantando y reforzando en este país?
Independientemente de
esta última cuestión, en mi opinión es un recorte más a los derechos
universales de las trabajadoras, de la gente más humilde, pero especialmente al
de las mujeres, a nuestra decisión de llevar una vida en libertad y con
dignidad de forma personal e individual.
Es una criminalización
contra la mujer, es un recorte a la libertad individual y personal de cada una
de nosotras.
Con estas “ideas
salvadoras”, que son recetas para quitarnos nuestros conocimientos y derechos,
es volver al fascio más cruel, al autoritarismo del estado y de la iglesia,
para imponernos su doble moral, porque esto volverá a provocar dolor y angustia
en muchas familias, pero también el volver a realizar el aborto en entidades
privadas(seguramente sostenidas y mantenidas por estos mismos que nos lo
prohíben por ley), volveremos a esas clínicas clandestinas…..
¡¡Tantos y tantos
derechos conseguidos, para desaparecer de un solo plumazo!!.
Con esto, es ver otro
ejemplo más que los políticos, la iglesia, el poder, los ricos y el estado,
solo ponen la zancadilla a las personas que queremos caminar hacia la libertad.
Libertad que nos quieren
quitar por el hecho de saber que un pueblo puede pensar, decidir y cuestionar; este
es el verdadero enemigo a su poder. El ver y el sentir que un pueblo puede ser
libre, les aterroriza, que el ser humano, sea hombre o mujer, niño o niña,
ancianos….tengamos capacidad de pensamiento crítico, capacidad de decisión y
capacidad de asumir nuestra libertad, nos hagan luchar y combatir, esto es lo
que realmente les da miedo. Esto es lo único que les puede hacer caer.
Hace muchos años atrás,
hubo gente que luchó, tuvo esperanza, sufrieron, pero también resistieron, este
es el ejemplo a seguir, la lucha, la resistencia y la esperanza.
Su estrategia es
asfixiarnos, es hacernos callar (sea con golpes, con miedo…) pero hay que
seguir gritando, hacernos escuchar y seguir en el camino de la lucha. Sea con
amigos y amigas, con compañeros y compañeras, en el trabajo de cada una, en el
sindicato….en la calle….
Hay que seguir buscando
la libertad, por los que quedaron a atrás, los que estamos y los que vendrán.
Soy educadora, maestra,
mujer y madre, estoy convencida de lo que soy y como soy, por mis principios,
mis ideales, mis valores libertarios, por mis luchas, tanto internas como
externas, pero sobre todo, por otras mujeres como yo, que no pueden hablar, por
mi hija y por todos los niños y niñas que formaran el futuro que no les están
dejando. Por eso y por ello seguiré hablando, pensando, gritando y luchando. Seguiré
resistiendo.
Seguro que en momentos
caeremos, lloraremos o sentiremos que no existe la esperanza, pero más que
nunca, en esos momentos, tendremos más fuerza para seguir hacia delante, seguir
en el camino de la libertad.
En muchos momentos
siento la mezcla del dolor y la rabia por ver y escuchar esos “errores” que se
repiten, por la aplicación de recetas que ya sabemos que no funcionan, pero que
si para ellos, los ricos, los poderosos, los de siempre.
Solo nos queda luchar,
ser conscientes de lo que estamos viviendo, de lo que nos están imponiendo, de
este duro y cruel capitalismo que lo han camuflado como estado de bienestar, nos
queda el seguir adelante, con fuerza y esperanza, resistir y tender la mano a todos aquellos que quieran
seguir este camino de ideales, de principios de lucha, de esfuerzo y del amor a
esos conocimientos libertarios.
Nos
queda el combatir y resistir.
Salud
compañeras!!!!!